La mayor cantidad de combustible, casi un millón de galones de diferentes derivados fueron a parar a manos de los extractores ilegales de oro y de contrabandistas fronterizos que negocian el producto sin control. También estos robos se entregan a las organizaciones criminales dedicadas a la producción de pasta de cocaína en laboratorios clandestinos instalados en la extensa zona fronteriza colombo-ecuatoriana.
Un paro de indígenas que se desarrolla en el país busca que el gobierno revea la eliminación del subsidio del diesel que, junto a la gasolina, son los productos que más roban y fuentes de enriquecimiento de comerciantes locales.
aseguró que la eliminación del subsidio permitirá destinar más recursos a programas sociales y que la medida golpearía a las redes de tráfico de combustible, que durante años se han beneficiado de extraer combustible barato de Ecuador para venderlo en Colombia y Perú.
El gobierno ha reiterado que no revisará la medida porque corta de raíz los incentivos del contrabando y dificulta que las mafias accedan a combustible barato para sus operaciones ilícitas.
Petroecuador estimó, que entre 2022 y octubre de 2024, el robo le costó a la compañía US$215 millones y que el número de conexiones ilegales detectadas en los oleoductos del país se ha más que triplicado en los últimos tres años.
Ecuador también sigue eliminando gradualmente los subsidios a la gasolina. Esta política de libre comercialización rige desde el año 2019.Esta medida ha provocado que los contrabandistas cambien sus tácticas y dejen de comprar en estaciones de servicio y auspicien el robo directo desde los poliductos.
Los productores de droga en los departamentos colombianos de frontera con Ecuador, Nariño y Putumayo, han recurrido durante años a combustible de contrabando o robado del norte de Ecuador. La producción de un kilo de cocaína requiere hasta 284 litros de combustible.
El diésel, por su parte, tiene una demanda sustancial en el mundo criminal. Los narcosubmarinos —muchos construidos en Ecuador— suelen estar equipados con motores diésel. El combustible también alimenta las dragas que usan los mineros ilegales para remover lechos de ríos en zonas remotas de Ecuador y Perú. Los precios récord del oro en los últimos meses han impulsado esta economía criminal y sostenido la demanda de combustible ilícito.
QUITO (Agencia ANE)._ En los primeros nueve meses del año las Fuerzas Armadas de Ecuador han descubierto 1.095 conexiones ilegales en los poliductos que transportan gasolinas y diesel.