Por Fernando Borja Gallegos
29 de junio de 2018
La visita del Vicepresidente de los Estados Unidos al Ecuador representa un aspecto muy importante para el país.
Luego de 10 años de aislamiento, la apertura al concierto internacional, constituye un paso fundamental que repercutirá en beneficio de los lazos de amistad de los pueblos americano-ecuatoriano.
Se debe rememorar que el gobierno americano renovó hace poco el Sistema Generalizado de Preferencias, dando muestras de la tradicional simpatía que inspira a los dos Estados.
En la corta visita, de menos de 48 horas, el Vicepresidente Mike Pence, ofreció alrededor de 7 millones de dólares en concepto de cooperación a fin de distribuirlo de la siguiente manera: un millón quinientos mil dólares para la lucha contra la corrupción; tres millones quinientos mil para la lucha contra el narcotráfico, seguridad y defensa; y, dos millones de ayuda para los migrantes venezolanos.
El Vicepresidente Pence, subrayó el positivo cambio de la política del Presidente Moreno frente a su antecesor.
El Vicepresidente Pence y su esposa Karen, participaron de una emotiva recepción ofrecida por el Presidente del Ecuador en el Palacio de Gobierno.
El Presidente Moreno, calificó de “productiva y positiva” la visita. Además, ratificó su postura de que “la solución para Venezuela solo pueden llevarla a cabo los venezolanos”.
Oportuno, en este preciso momento, rememorar y, por ende, ratificar mi criterio expuesto en mi artículo, cuyo título es “NICARAGUA: ENTRE EL TERROR Y LA MISERIA”, publicado el 8 de junio de 2018, en el cual “exterioricé mi anhelo de que tanto el gobierno de Nicaragua como el gobierno de Venezuela, convoquen a elecciones libres, como único camino para restablecer el orden, la tranquilidad y la justicia”.
El Ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana, en breve síntesis destacó los temas planteados al Vicepresidente Pence, dentro de ellos, “el acuerdo para integrar una mesa de diálogo político-bilateral y al Consejo de Comercio Exterior” para estrechar las relaciones.
Se infiere de lo expuesto, que el cambio de actitud del gobierno ecuatoriano en política internacional es apreciado por la mayoría de la sociedad y las aisladas críticas de seres retrógrados, no tienen fundamento y son rechazadas por la mayoría.
Interesante traer a la memoria que la Casa Blanca y el Kremlin, simultáneamente, anunciaron una reunión de los Presidentes Donald Trump y Vladimir Putin, que tendrá lugar en Helsinski, con el objetivo primordial de mejorar sus relaciones.
Por tanto, aspiro a que la República del Ecuador mantenga y estreche sus relaciones internacionales con todos los países, único camino que repercutirá en el incremento del intercambio político y comercial.