Por Fernando Borja Gallegos
25 de marzo de 2024
El viernes pasado, tras el ataque a la Sala de Conciertos CROCUS CITY HALL, el mundo entero reaccionó indignado, entre otros, el Ecuador, Estados Unidos, Pakistán, Cuba, Bielorrusia, Alemania, México, Colombia, la Unión Europea, España, Francia, China y el Secretario General de la ONU, exteriorizaron su pesar a las víctimas y al Gobierno Ruso.
En las últimas horas, Rusia mostró a los cuatro acusados del ataque que dejó al menos 137 muertos en Moscú.
Los detenidos por el ataque a la Sala de Conciertos Crocus City Hall, aceptaron, tres de ellos, su culpabilidad ante el Tribunal que conoce el caso.
El delito por el atentado terrorista, se castiga con la pena máxima de cadena perpetua.
Los cuatro acusados, se encuentran con “detención preventiva”, fijada hasta el 22 de mayo, medida que puede extenderse a la espera del correspondiente juicio.
Los criminales que irrumpieron armados dispararon contra hombres, mujeres y niños e incendiaron parte de la sala. El atentado a más de los muertos, dejó más de 190 heridos, muchos de los cuales se encuentran en estado crítico.
Hasta el momento, el grupo yihadista, se declaró responsable del ataque criminal.
En todo caso, el Servicio de Seguridad Ruso aseveró que los sospechosos tenían contactos con Ucrania y que por tanto intentaron huir a ese país, luego de perpetrado el atentado.
El Presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, desechó cualquier vinculación con el ataque.
Lo afirmado por Zelensky, fue apoyado por el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Adrienne Watson, quien afirmó que “el grupo yihadista es el único responsable y que Ucrania no tiene responsabilidad alguna”.
Importante subrayar, que algunas autoridades norteamericanas e inglesas, hace varios días, “habían advertido a Rusia, sobre un posible ataque terrorista en Moscú”.
El Presidente, Vladimir Putin, así como los responsables de los servicios de seguridad y de relaciones exteriores, el fin de semana, guardaron silencio en lo atinente a la implicación del grupo yihadista y la investigada actitud de Kiev sobre el tema.
Se infiere de lo expuesto, la necesidad de que se investigue con seriedad y profundidad a los responsables materiales e intelectuales del comentado atentado que indigna a toda persona recta. Imperativo que los culpables sean castigados ejemplarmente.
