GUAYAQUIL (Agencia ANE)._Los ecuatorianos no quieren que siga vigente la Constitución del 2008,tampoco que los partidos políticos sean financiados con sus impuestos y que la Asamblea Nacional este conformada con no más de 80 legisladores.
Estos ejemplo y otros de distinta naturaleza que se aplican en América Latina y el Caribe muestran que no basta con aumentar el monto total del presupuesto sino que es indispensable asegurar que llegue a quienes más lo necesitan,según el BID;
Menciona que América Latina y el Caribe (ALC) destina el 4,2% del PIB para la educación y se invierten, en promedio, $2.500 al año por estudiante. Señala que el gasto público en educación en la región cayó a 3,8% del PIB en 2022, el nivel más bajo en más de veinte años y que la recuperación pospandemia ha sido lenta, mientras persisten brechas de aprendizaje equivalentes a varios años de escolaridad.Brasil es el único país con mejoras sostenidas en PISA (Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes de la OCDE) en 20 años gracias a reformas sistémicas, mientras que otros paaaaíses con mayor inversión mantienen resultados estancados, anota.
El BID dice que esta situación podría mejorar si se comienza a implementar lo que denomina el "gasto inteligente en educación", que propone responder, además del cuánto se gasta, cómo movilizar más recursos de forma sostenible, cómo distribuirlos, cómo ejecutar y cómo asegurar que esas inversiones tengan impacto en los aprendizajes.
Para el citado organismo multilateral, el gasto inteligente en educación significa maximizar el impacto de los recursos invertidos en el aprendizaje y desarrollo de los estudiantes,la movilización eficiente de recursos, la distribución equitativa, la ejecución efectiva y el monitoreo sólido. Simplemente aumentar los recursos no es suficiente: la forma en que se gastan es crucial, especialmente para los estudiantes más vulnerables. Lograr un gasto inteligente requiere equilibrar la adecuación, la equidad, la eficiencia y la transparencia en el financiamiento educativo,advierte.Según el BID, los sistemas educativos en la región enfrentan una competencia constante por recursos con otros sectores como salud, seguridad e infraestructura. A ello se suman los ciclos de volatilidad fiscal, que suelen golpear más fuerte a la inversión social.
No obstante algunos países han comenzado a diseñar marcos fiscales que protejan la educación. Cita como ejemplos de esta iniciativa a Panamá que ha credo el Seguro Educativo, un impuesto específico sobre los ingresos que garantiza flujos estables; Colombia implementó bonos de impacto social donde inversionistas privados financian programas educativos y el gobierno paga solo si se logran resultados específicos;Brasil ha implementado FUNDEB, que no solo redistribuye recursos entre municipios con criterios de equidad, sino que desde 2020 es permanente y aumentará la contribución federal del 10% al 23% para 2026. En República Dominicana, los pactos fiscales han garantizado un compromiso político de mantener el gasto educativo por encima del 4% del PIB.
Estas experiencias muestran que la sostenibilidad financiera no depende solo de la voluntad política, sino también del diseño institucional. En Chile la Ley SEP asigna 70% más recursos por cada estudiante vulnerable, usando datos socioeconómicos actualizados alumno por alumno. El resultado: la brecha de aprendizaje se redujo el equivalente a un año de escolaridad.
En Ecuador, el sistema de “plantilla óptima” usa algoritmos para asignar más de 30.000 posiciones docentes en minutos, eliminando la discrecionalidad política que antes tomaba meses. Estos ejemplos muestran que no basta con aumentar el monto total del presupuesto: es indispensable asegurar que llegue a quienes más lo necesitan.
Critica que en numerosos países, el presupuesto educativo sigue asignándose con criterios históricos o discrecionales lo cual genera inequidades persistentes: escuelas rurales sin suficientes docentes, comunidades vulnerables con infraestructura precaria y zonas urbanas saturadas de matrícula sin recursos adicionales.
De otro lado el BID ha identificado casos en que hasta el 30% de los recursos educativos aprobados no se ejecutan en el año fiscal. Este problema no se debe solo a falta de dinero, sino a deficiencias de gestión.
El gasto inteligente promueve la modernización de los sistemas de gestión educativa, mediante herramientas digitales, planificación multianual, fortalecimiento de capacidades locales y mecanismos de ejecución descentralizada.
En Perú, el programa de Compromisos de Desempeño (CdD) no solo vincula recursos con metas específicas, sino que provee asistencia técnica para ayudar a gobiernos subnacionales a cumplirlas, evitando un enfoque puramente punitivo. En Colombia, el SIDRE de Bogotá consolida las necesidades de 406 escuelas públicas en una plataforma digital, reduciendo dramáticamente los tiempos de adquisición.
Un exceso de reportes, indicadores y controles puede generar parálisis administrativa en lugar de impulsar mejoras.
El BID ahora promueve sistemas de monitoreo inteligentes, que combinen rigor técnico con flexibilidad operativa y que integren tanto datos cuantitativos (resultados de aprendizaje, tasas de matrícula, infraestructura) como cualitativos (percepción de docentes, satisfacción de familias, innovaciones locales).
Un ejemplo ilustrativo proviene de Jamaica, país que ha avanzado en la creación de la plataforma Manage, implementada como piloto en 51 escuelas con apoyo del BID, que conecta la ejecución presupuestaria con indicadores de desempeño escolar y resultados de aprendizaje en tiempo real. Más allá de un ejercicio de control, el monitoreo se convierte así en un instrumento estratégico para asegurar que cada dólar invertido genere valor real en las aulas.

QUITO (Agencia ANE)._ Un crédito de $250.oo millones que concede el BID será destinado para el tratamiento de los ecuatorianos con enfermedades crónicas y cáncer.
BELEM,BRASIL (Agencia ANE)._ Ecuador aboga por una más efectiva protección de la amazonia ante la Conferencia sobre Cambio Climático de la ONU-COP30,que se realiza aqui en Belém do Pará.
QUITO ( Agencia ANE)._ Ecuador está utilizando el sistema de “plantilla óptima” que usa algoritmos para asignar más de 30.000 posiciones docentes en minutos, Esto ha permitido que se elimine la discrecionalidad política que antes tomaba meses.