Por Fernando Borja Gallegos
19 de abril de 2019
“He visto a otros desfilar esposados, guardando su miserable existencia, pero Alan García no tiene por qué sufrir esas injusticias y circos, por eso les dejo a mis hijos la dignidad de mis decisiones, a mis compañeros una señal de orgullo y mi cadáver como muestra de mi desprecio hacia mis adversarios, porque ya cumplí la misión que me impuse…Que Dios, al que voy con dignidad, proteja a los de buen corazón y a los más humildes”.
La precedente carta, que en parte la transcribo, fue leída por la hija del ex presidente Alan García, Luciana García Nores. Misiva que la escribió su padre pocos minutos antes de su suicidio.
Alan García, muere a los 69 años de edad, luego de haber ejercido por dos ocasiones la Presidencia del Perú, en los años de 1985 a 1990 y de 2006 a 2011. Fue el Presidente más joven en asumir el poder. Se desempeñó también como diputado y se destacó como jurista y orador.
Sus padres Nytha Pérez Rojas y Carlos García Ronceros, fueron destacados políticos y fundadores del Partido Aprista Peruano.
El ex Presidente García en el ejercicio de su alto cargo fue acusado de corrupción…más García siempre negó. En todo caso, con su muerte todas las causas penales concluyen.
Hoy, el cuerpo del ex Presidente será cremado. Posteriormente, en ceremonia íntima enterrado en el Cementerio de Mapfre.
En las exequias del ex Presidente García, mucha gente acompañó el cortejo fúnebre, con muestras de dolor profundo. Su líder del APRA había partido.
Al escribir este artículo, lo hago con tristeza, no entiendo cómo, en el mundo contemporáneo la mayoría de políticos actúan al margen de la ley, sin pensar que tarde o temprano tienen que rendir cuentas a la justicia.
Oportuno rememorar que el ex Presidente García, solicitó asilo diplomático el 17 de noviembre del 2018, para lo cual ingresó a la residencia del Embajador de Uruguay en Lima.
El 3 de diciembre de 2018, el Presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, acompañado de su Canciller Rodolfo Nin Novoa, en rueda de prensa, afirmó: “No hemos concedido el pedido de asilo porque en Perú funcionan libremente los tres Poderes del Estado”.
Por tanto, el ex Presidente García salió de la Embajada de Uruguay en Lima.
En todo caso, se mantuvo vigente la orden de impedimento de salida del país por 18 meses, dispuesta por el Poder Judicial.
Reconozco y comparto el sentir del ex Presidente García, en tanto en cuanto, en su carta afirma: “He visto a otros desfilar esposados, guardando su miserable existencia. Pero Alan García no tiene por qué sufrir esas injusticias y circos”.
Que gran verdad dicha por García. ¿Por qué esposar y disfrazar a los detenidos?, es un gesto de maldad. Se los debe detener…por qué esposarlos, ¿por qué uniformarlos?, muy bien dentro del centro carcelario…pero no fuera de él.
Alan García fue vencido por las circunstancias, pero no humillado en su derrota. Dios lo guarde en paz.
Quizá, este lamentable acontecimiento, obligue a cambiar los procedimientos en todos los centros de detención.