DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
18 ENERO DE 1979
Contra viento y marea
CRISIS DE CONFIANZA
Javier Simancas C. (Juan de la Luna S.)*
El General Andrés Arrata, Ministro de Defensa Nacional, ha ratificado la decisión de las Fuerzas Armadas de devolver el Poder a los civiles el próximo 10 de agosto una vez que los ecuatorianos, mediante votación directa y secreta, escojan al Presidente y Vicepresidente Constitucional y a los integrantes de la Cámara Nacional de Representantes.
Para lograr este objetivo, ha dicho el ministro es necesario el total apoyo de los civiles. Estas declaraciones vertidas por uno de los mesurados oficiales que ha tenido la Institución Armada y quien, desde que ejerce esa delicada función, ha sido uno de los más fervientes auspiciadores de la vuelta a la normalidad constitucional y que las Fuerzas Armadas se reintegren a sus específicas funciones. Por desgracia estas enunciados no son suficientes mientras no se ponga en forma definitiva a la crisis de confianza que tienen los ecuatorianos, especialmente porque no está totalmente aclarado el atentado de Abdón Calderón Muñoz.
Es cierto que este sangriento acontecimiento tampoco puede servir de estímulo para que determinados grupos políticos alimenten la esperanza de frustrar la dilatada vía de la democratización del país, porque con ella están contribuyendo a que la República se hunda más en el caos y descomposición política, social y económica que vive.
La crisis de confianza se refleja en la preocupación que sienten los ecuatorianos, unas veces por la falta de garantías y seguridad para el normal desenvolvimiento de las actividades por los abusos de autoridad que campean en toda la República y otras veces porque los actos de violencia, terrorismo afectan a la paz y la normal convivencia pacífica.
Ya algunos dirigentes han dicho que están preocupados por su vida y la de su familia. Estos están tomando sus propias medidas de seguridad ante la impotencia de quienes deben velar porque todo la colectividad esté totalmente segura y protegida.
En los meses que falta para que asuma el poder el Presidente electo, es necesario contar con las más amplias garantías, que la libertad de expresión y pensamiento, que el derecho a la información, a la libre asociación política no se convierta en el germen de la discordia entre gobernantes y gobernados y de otros males que sin duda afectarán al proceso de constitucionalización.
También se hace indispensable que los candidatos hablen al pueblo ecuatoriano y a sus electores no con el lenguaje de las promesas que utilizaron en la primera vuelta electoral, sino con la exhibición de un concreto programa de gobierno y de cómo van hacer la tan anunciada transformación social desde arriba para de esta manera superar la crisis de confianza que tenemos.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
11 DE ENERO DE 1979
Contra viento y marea
1095 DÍAS DESPUÉS
Javier Simancas C. (Juan de la Luna S.)*
Hoy han transcurrido 1095 días desde que las Fuerzas Armadas decidieron devolver el poder a los civiles, previo un proceso de cuatro etapas.
Han sido días duros y difíciles para los ecuatorianos; hemos sido testigos de una violencia sin bandera política, de actos terroristas sin identificación, de presiones, persecuciones, masacres y de un crimen político, cuyas consecuencias aún se sienten porque el pueblo ecuatoriano insiste en castigar a los autores materiales e intelectuales. El experimento democrático y sus etapas ha sido tortuoso y ha ocupado más tiempo del señalado por la Institución Armada. Muchos pensaron que mediante ese plan se sentaban bases sólidas sobre las cuales el futuro del Gobierno Civil podría ejercer sus funciones, dentro de las exigencias de cambio y transformación que anhela el pueblo.
El plan no ha satisfecho este anhelo por engorroso y largo, por sus marchas y contramarchas o porque ha contribuido para burlarse de voluntad popular, sin embargo de su masiva participación en los actos electorales realizados hasta esa fecha.
Si el plan no tuvo ninguna novedad en cuanto se refiere al sistema tradicional de transferencias del Poder Militar al Poder Civil, lo más conveniente hubiera sido convocar a la tan repudiada figura de la Asamblea Constituyente.
A esta fecha ya hubiéramos contado con Presidente Constitucional de la República ya que, por más obstáculos que se hubieran presentado los parlamentarios habrían sido nombrados hasta mediados de 1977; seis meses de gestión para elaborar una nueva Carta Política, seis meses para la campaña electoral y el 10 de agosto de 1979, el nuevo Presidente Constitucional, estaría al frente de las riendas del Estado.
Los 1095 días han servido además para evidenciar la falta de consistencia de los partidos políticos. Aquellos de vieja contextura no han logrado salir de sus obsoletos moldes y aquellos hijos del resentimiento y ambición de sus dirigentes sobreviven gracias al voto de los ecuatorianos
Hemos dado una enorme vuelta: plan de retorno en cuatro etapas. La Institución Armada, al menos, por este medio, impidió que las ambiciones de grupo impongan sus propósitos antidemocráticos. Permitió, de otra parte, demostrar que cuando los ecuatorianos anhelan la paz y la reconquista de las instituciones democráticas, no existe ningún poder que lo detenga.
El pueblo ha sido paciente en aras de la convivencia nacional. Aceptó el reto y la imposición por el bien de la Patria. Ahora les toca a quienes sean los mejores representantes cristalizar esta aspiración popular esperada y anhelada desde hace ocho años.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
4 DE ENERO DE 1979
Contra viento y marea
EL TERRORISMO
Javier Simancas C. (Juan de la Luna S.)*
El terrorismo ha querido interferir en el proceso de restauración democrática valiéndose de la dinamita y el revólver.
A medida que se ha profundizado en las investigaciones sobre el atentado criminal que ha costado la vida del fundador del FRA,Abdón Calderón Muñoz, los terroristas y especialmente un testigo voluntario ha dado las pistas suficientes para determinar que los instigadores buscaban crear el desorden y el caos para impedir el acceso al poder de un Gobierno civil legítimamente escogido en las urnas.
El terrorismo ha sido un medio de actuar de los sectores de la extrema derecha y de la extrema izquierda; ambos sectores siempre se han opuesto al libre juego de la democracia, y han postulado la violencia como un medio de imponerse.
Lamentablemente, en nuestra América Latina ha habido también ejemplos de actos de violencia instigados por los gobiernos de facto; como los casos de Brasil, en donde grupos de terroristas secuestran, matan y hacen desaparecer a hombres y mujeres de pensamientos libres. En Chile los últimos descubrimientos de cadáveres maniatados y con signos de tortura y tiros de gracia, han colocado en mal predicamento al ya tan desprestigiado y autoritario régimen del General Augusto Pinochet.
El caso del señor Letelier, del General Prat determina que el terrorismo internacional ha interferido e inspirado al gobierno militar. Casos y cosas,así mismo, graves han sucedido en Uruguay, Paraguay, Argentina, Bolivia, donde el terrorismo de Estado ha sido amparado por las Instituciones Policiales.
Estamos seguros que en el Ecuador lo sucedido no comience a ser una réplica del autoritarismo y violencia del Cono Sur. El grupo de extremistas que ha venido actuando ha usado la violencia torpe y pese a ello no han logrado impedir que la paz y el anhelo de una auténtica reconciliación nacional se haga realidad.
Sus actores e instigadores deberán ser sancionados mediante una eficaz acción de la ley, y porque sobre todo es necesario descubrir a los autores intelectuales que han adoptado como arma política el terror ante la ineficacia de su acción política.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
29 DE DICIEMBRE DE 1978
Contra viento y marea
EL ARTE DE CANTAR
Javier Simancas C. (Juan de la Luna S.)*
El arte de cantar es un don o cualidad excepcional que poseen muy pocos seres humanos. Don que les ha dado Dios, dicen los más vehementes. En nuestro país son muy escasos los valores artísticos y parte de ellos están dedicando su capacidad y esfuerzo para rescatar a nuestra música como una auténtica expresión cultural.
Es gente joven en su mayoría que se ha propuesto encontrar camino propio, autónomo para nuestra música y con ello detener esa corriente avasalladora foránea que ahora, bajo un falso concepto de modernismo, ha hecho presa de la juventud, que desprecia nuestro arte popular o se inclina con mucha facilidad por la música pop, el rock y también por la última corriente travoltiana.
El trabajo de esos grupos se ha repartido por varias regiones de la República. Parten del principio de que en el Ecuador casi se ha llegado al final de una era musical donde sus manifestaciones autóctonas han ido perdiendo consistencia, para dar paso a una falsa imagen musical aferrada a un sentimentalismo sensiblero, que sirve para divertir frívolamente antes que ser un medio cultural.
Los grupos a los que hago referencia están encabezados por jóvenes universitarios, entre los que se destacan algunos lojanos, como Miguel Ángel Mora, Benjamín Ortega y principalmente Tulio Bustos Cordero, cantautores, poetas y músicos que desde de esa capital provincial vienen trabajando por lo que queda de esa fuente de inspiración nacional, como es la música lojana, que se ha caracterizado por ser la más rica y profunda de la República.
Bustos Cordero y los otros cantores mencionados han tenido muy pocas oportunidades de hacer conocer su talento artístico. Las raras ocasiones que se han presentado ha sido ante reducidos públicos o ante grupos sociales que se sienten incompetentes para apoyar sus horizontes pero que proclaman ser revolucionarios.
Merece un reconocimiento lo hecho por el Banco Central del Ecuador, mediante un concurso de música nacional; otro tanto la Casa de la Cultura Ecuatoriana que ha organizado algunos recitales, así como otras entidades públicas que han invitado a estos jóvenes compositores.
Esta tarea constante de Tulio Bustos y de los otros investigadores musicales, es muy ajena aquellas que hacen algunos grupos folclóricos que han centrado su atención en las denominadas peñas y su difusión musical tiene más de afuera que de nuestra rica y refinada cultura musical.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
27 DE DICIEMBRE DE 1978
LOS PARTIDOS DEBILES
Contra viento y marea
Javier Simancas C (Juan de la Luna S.)*
Una de las características de los sistemas democráticos es ser más perfectos, contar con una multiplicidad de tendencias o agrupaciones políticas y la existencia de partidos políticos que no sean de nombre y membrete.
Para ser preciso y hablando de la democracia representativa occidental, liderada por Estados Unidos y Gran Bretaña, el sistema está sustentado en dos grandes partidos: uno que está en el Poder y otro que no participan de él, pero en permanente actividad, tolerando eso sí, aquellas tendencias ideológicas que hacen minoría, pero que no pasan de una docena de organizaciones.
Este ejemplo ilustra a los que hay que propender en Ecuador para evitar estos agitados procesos de alternancia entre un régimen de facto y uno de tipo civil, este último cada vez más esporádico.
En el país nos encontramos con tantas tendencias, grupos y partidos que pese a las legislaciones sobre la materia, aparecen y desaparecen según las condiciones electorales del momento. Asoman grupos o mini partidos que con el único propósito de, al amparo del nombre, saciar sus ambiciones políticas personales. Son los que hacen del oportunismo una bandera.
Ha llegado la hora de que, por primera vez, el Tribunal Supremo Electoral actúe como verdadero juez y como el organismo llamado a robustecer las bases democráticas del país que, sin miramientos, ni influencias y presiones, resuelva sobre la suerte de esos pequeños grupos auto calificados Partidos, que no representan ni el 25 % de la militancia ideológica de la nación.
Son estas agrupaciones y su proliferación las que debilitan el sistema democrático ecuatoriano, porque son muchos en pugna, siempre caminando a su autodestrucción; son tan débiles que no logran siquiera estructurar sus cuadros directivos provinciales.
La inestabilidad democrática que vive el país, en gran parte la provocan los débiles partidos políticos. Esta en manos de los dirigentes honestos y patriotas reabrir el camino un sistema de plenas garantías y libertades.
Tiene la palabra el grupo de lo ocho cuestionados, algunos de los cuales no han sabido recoger la bandera ideológica y doctrinaria dejada por sus fundadores.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
21 DE DICIEMBRE DE 1978
Contra viento y marea
REORGANIZACIÓN POLICIAL
Javier Simancas C.(Juan de la Luna S.)*
El mejor regalo navideño de 1978 sería que el Gobierno Militar piense seriamente en una total reorganización policial y especialmente del cuerpo de seguridad e investigación.
¿Por qué esta reorganización? Porque los ecuatorianos sentimos en el ambiente esa angustiosa idea de que no estamos ni protegidos ni custodiados ni garantizados como para poder desempeñar un normal desenvolvimiento de actividades y porque cada día son más los casos que quedan en la impunidad y más son los atracos, atentados y perjuicios a los bienes del Estado y de los particulares.
Uno de los factores básicos para plantear esta reorganización, no radica en la falta de conocimientos y capacitación de métodos de investigación que han recibido desde el exterior los personeros policiales destinados a esta tareas, sino en su estructura orgánica, pues la mayoría de los cuerpos nacionales y provinciales están integrados por malos elementos. Casi ningún agente investigador, sea el 001 o el 079, por decir números, han concluido la instrucción primaria y si lo han hecho, saben leer y escribir a duras penas y las tablas de multiplicar, de ahí que los servicios sean una queja permanente de los afectados.
Estos agentes y el personal de tropas son gente reclutada en el sector rural en su mayoría, sin una selección previa, sino porque son jóvenes que abandonan el campo y recurren a la Institución Policial como último recurso para conseguir trabajo. No es culpa de ellos que arrastren consigo malos hábitos, tengan una formación inconsistente y que cometan abusos, atropellos, actos de represión, tortura, puesto que desconocen los principios elementales en que se sustentan los Derechos Humanos. Son muchos los que han tenido que "comprar" los puestos.
No cumplen sus tareas como establecen las normas disciplinarias de los organismos a que pertenecen porque, además de tener estos defectos sociales, sus salarios son tan bajos que tienen que recurrir a otras medidas que les permitan medianamente subsistir.
Esta reorganización debe entonces comprender el escogimiento de personal idóneo, honrado, honesto, culto, porque de lo contrario de qué ¿ sirven los sofisticados métodos de investigación adquiridos, la preparación de la oficialidad para dar efectivos golpes a la delincuencia, si en su seno se genera con estos elementos el vicio, la prostitución y el crimen.?
Los cuerpos de seguridad policial deben caracterizarse por el respeto a los Derechos Humanos, pues todavía hay casos de que, para ser confesar un delito se emplean métodos represivos, como el de hacer tomar al delincuente una porción de agua con detergente y sal, colgarlos de los pulgares y someterlos a descargas eléctricas, sumergimientos en agua, baños en agua helada, ruidos insoportables en sus celdas.
En la capital de la República hay bienes valiosos en el orden patrimonial, vidas humanas importantes que son codiciadas para el asalto, el crimen y el daño. Estos intereses que son parte del pueblo tienen la obligación de custodiar los agentes policiales y su cuerpo de seguridad.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
20 DE DICIEMBRE DE 1978
Contra viento y marea
NO A LA GUERRA
Javier Simancas C, (Juan de la Luna S).*
La paz de América Latina está amenazada y con ello el despertar De viejas tentaciones expansionistas que siguen hostigando a los pequeños países que afianzan su soberanía y estabilidad en los fundamentos de la convivencia civilizada entre los pueblos y regiones de este Continente y de toda la tierra.
Esta amenaza de un conflicto armado proviene de los dos países ubicados en el cono sur que discuten sobre una franja de territorio desde hace varios años, sin que hasta el momento hayan podido llegar a un acuerdo. De un lado Chile con una frontera por el Estrecho de Magallanes,que corta en línea recta la Isla Grande de Tierra de Fuego y toda la isla ubicada al sur del Canal Beagle que dice le pertenece y como lógica consecuencia le dan salida al océano Atlántico. Por su parte Argentina sostiene que no ha de consentir ningún atentado a su integridad territorial y que defenderá sus derechos en cualquier terreno. Plantea que para llegar a cualquier solución, primero se debe fijar fronteras.
Las negociaciones han llegado a un punto muerto, mientras que los preparativos guerristas se intensifican mientras en el interior de cada uno de los países se vive una tensa tranquilidad.
Esta grave confrontación del sur del continente, indudablemente, ya esta repercutiendo en la Región y los países miran con temor al estallido de una guerra, que no tendrá ganador si se toma en cuenta que las condiciones económicas de Argentina y Chile no pueden resistir un conflicto de esta naturaleza por largo tiempo.
Los jefes de Gobierno de esos Estados, deben ante todo reflexionar que América que la vida pacífica de sus naciones y de sus vecinos depende de la altura y ponderación con que discutan los asuntos internacionales y más bien deben enrumbar sus acciones hacia el robustecimiento de las relaciones de sus pueblos dentro de un ambiente de plenas garantías individuales y colectivas. Es cierto que cada uno tiene su razón legal, histórica y jurídica; pero es cierto también que la paz del continente no puede estar amenazada con medidas que acarrean desolación, miseria y dolor entre los pueblos.
La vocación de América ha sido siempre la de convivir pacíficamente; no es la hora de despertar ambiciones territoriales que hundirán a nuestra región que aún no sale de la violencia y el autoritarismo.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
14 DE DICIEMBRE DE 1978
Contra viento y marea
POR UN AMBIENTE DE PAZ Y SEGURIDAD
Javier Simancas C.(Juan de la Luna S.)*
Hay cosas que se ven claras y otras oscuras y que no se entienden alrededor del atentado y posterior muerte del dirigente alfarista, Abdón Calderón Muñoz.
Se vio muy claro que por iniciativa particular se logró descubrir a parte de los actores de este complot político, logrando su detención y posterior entrega a los agentes oficiales. La labor pesquisable de la familia Calderón tuvo la virtud de comenzar inmediatamente después que el líder cayó víctima de los disparos que posteriormente cegaron su vida.
Se vio oscuro y que no se entiende es la falta de celeridad en las mismas labores investigativas por parte de la Policía Nacional, sin embargo de que todo el país conoce que, para investigar otro tipo de delito, ha merecido elogios. A esto se añade la posición del Ministro de Gobierno y Policía que, en vez de aclarar y dar luz al asunto, se limitó a realizar severas advertencias.
La ciudadanía no está satisfecha en torno a lo que ha hecho el Gobierno para descubrir a los autores y cómplices del atentado de Calderón. Flota por esta circunstancia un ambiente de inquietud, zozobra e inseguridad. gobierno ha anunciado que adoptará medidas que garanticen la vida de los ecuatorianos que de, una u otra manera, están comprometidos con los intereses populares y han jurado por su honor defender al pueblo hasta las últimas consecuencias.
Hasta el momento ninguna información ha recibido el país de los pasos que se han dado para descubrir a los verdaderos autores materiales e intelectuales del hecho.
Guillermo Méndez, uno de los detenidos por el atentado, parece ser solamente un asalariado bien pagado que cumplió su criminal papel. A lo mejor mucho o no sabe nada. Un clima de incertidumbre y zozobra existe, pues fuerzas ocultas sin identificación, ni filiación política, pueden volver a dar el zarpazo criminal que cieguen otras vidas muchas comprometidas con los intereses del pueblo y que anhelan la transformación social del Ecuador.
*Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
6 DE DICIEMBRE DE 1978
Contra viento y marea
MEJORES GARANTÍAS AL LIBRE PENSAMIENTO
Javier Simancas C.(Juan de la Luna S.)*
Para cuando quede aclarado el acto terrorista que lo tiene entre la vida y la muerte al candidato presidencial por el Frente Radical Alfarista, Abdón Calderón Muñoz, los ecuatorianos, a lo mejor, podríamos, respirar tranquilos porque las autoridades correspondientes dispondrán las medidas de control y seguridad más enérgicas para garantizar la vida humana de todos, hoy amenazada por los brotes de violencia.
Pero si no se toman las medidas anunciadas la República podría entrar en una etapa de destrucción y de terror que, indudablemente, estaría encaminada a su ruina y sobre todo a interrumpir el proceso eleccionario.
El haber escogido a un líder político, con la intención de silenciar su voz que siempre ha sido de denuncia contra la corrupción pública, contra los hambreadores del pueblo, contra los Generales gobernantes, revela una planificada campaña de terror, en momentos en que más se necesita paz y tranquilidad para arribar con éxito hacia el restablecimiento de la vida democrática y constitucional.
El acto de agresión contra Calderón es una seria advertencia para el futuro, puesto que nadie estará garantizado o libre de cualquier atentado, más que todo aquellos políticos, periodistas, escritores, poetas que han levantado la bandera de lucha en defensa de los intereses nacionales y de los ecuatorianos.
El Ecuador desde hace muchos años se ha convertido en tierra fértil para la impunidad y la corrupción. No existen leyes ni reglamentos que impidan el ingreso a nuestro territorio de elementos perniciosos, de mercenarios y sicarios que ofrecen sus servicios a quienes creen que la fuerza bruta es el camino para acallar los ideales que defendienden, de alguna manera, los intereses de la patria, como proclamaba el honesto y valiente economista Calderón Muñoz.
En Ecuador no existe un registro actualizado para identificar a los ciudadanos que adquieren armas y se dan casos que, por lujo o porque tienen que saldar cuentas pendientes, adquieren éstas a cualquier precio, incluso aquellas que solo pueden portar los agentes de las fuerzas del orden. El tráfico ilegal de es común y corriente y no hay quien ponga fin a estas irregularidades. La venta de explosivos se hace públicamente de ahí que los terroristas utilicen estos elementos con mayor proporción, como ha sucedido últimamente en la ciudad de Guayaquil que vivió una ola de atentados que hasta el momento no tienen identificación precisa de quienes fueron sus autores.
La solución no es sólo sancionar a los autores sino saber que los ecuatorianos estaremos garantizados mediante un severo control de la seguridad pública, tarea que le corresponde al Gobierno y que debe efectivizarse en el menor tiempo; también es obligación de los partidos políticos oponerse a cualquier intención fascista que quiera introducirse en este país.
Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
DIARIO EL TIEMPO DE QUITO
25 DE NOVIEMBRE DE 1978
Contra viento y marea
EN DEFENSA DEL CONSUMIDOR
Javier Simancas C (Juan de la Luna S.)
La mayor parte de los productos alimenticios han subido de precio. El Gobierno sin embargo no ha tomado ninguna decisión en defensa del consumidor ecuatoriano que en alto porcentaje depende de sueldos y salarios fijos y bajos.
Las causas para esta escalada alcista tiene múltiples orígenes. Aducen dicho incremento por la falta de agua para productos como la papa que no ha tenido una cosecha normal. En el caso de las gramíneas el aumento es atribuido a una mala política gubernamental instrumentada a través de la Empresa Estatal de Comercialización, ENAC y por la competencia entre los pequeños comerciantes y los almacenes de la empresa nacional de productos vitales, ENPROVIT en donde, incluso, se dan casos de perjuicio al consumidor por la irregular forma de enfundar los productos en sus bodegas. A esto se añade la especulación y el acaparamiento de los que se dedican a explotar a los consumidores.
Frente a esta situación, en cambio, los sueldos y los salarios continúan inalterables desde hace más de dos años, Son estos sectores los más afectados que se han visto obligados a adoptar medidas de hecho y sufrir las consecuencias que se derivan de ellas. En esta capital decenas de trabajadores y estudiantes están en huelga de hambre reclamando porque bajen los precios, estabilidad en sus trabajos, alza de salarios, en fin, un sin número aspiraciones sociales.
La hipócrita neutralidad con que pretenden actuar las autoridades competentes, sean policiales, económicas y de trabajo en defensa del trabajador y del consumidor es la causa y muy grave que alimenta la alteración de la paz pública.
No hay política definida en defensa del consumidor, no hay control de precios, no hay esperanzas de solucionar los problemas salariales. La familia ecuatoriana vive en un ambiente de inseguridad social y económica que no concuerda con los principios universales consagrados en los Derechos Humanos, concretamente en su artículo 25 que dice textualmente: “ ...Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que lo asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica, y los servicios sociales necesarios; tiene así mismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez y otros casos de pérdidas de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad ...”.
Artículo escrito por Javier Simancas C. con el seudónimo de Juan de la Luna S.
© 2025 Noticias Equinoccio